Consternación ha causado la muerte del reconocido arrocero Javier Gámez Melo, de 50 años, entre sus amigos quienes siempre lo caracterizaron como una persona fuerte en sus decisiones. Ayer, cuando salió con su pistola y en su camioneta, sus familiares se imaginaron que algo no andaba bien por el estado depresivo en el que últimamente se encontraba debido a problemas sentimentales y económicos.
Efraín Cabello amigo personal de la víctima dijo que todo lo encontrado y los antecedentes que venía presentando por su situación personal y la carta que le dejó a su mamá donde le pedía perdón y a otros familiares, por la decisión que había tomado en atentar con su vida, obedece que fue un suicidio.
“Pero de todas maneras las investigaciones se desarrollaran con los miembros de la Sijin quienes realizaron el peritazgo para esclarecer el caso”, indicó además su amigo Cabello.
Se pudo conocer que los restos óseos serán llevados a Bogotá para los respectivos exámenes, de igual manera se supo que están analizando la carta con su tipo de letra para corroborar si fue escrita por él.
En Medicina Legal llevaron ayer la carta odontológica que él tenía con el odontólogo personal y al parecer, también corresponden a Javier. Igualmente la madre y uno de los hijos le están tomando muestras para pruebas de ADN para una mayor confirmación.
Javier Gámez Melo era oriundo de Valledupar con raíces en La Guajira, era técnico administrativo y agropecuario y miembro activo de la Federación de Arrocero.